Por: Dra. Monique Sánchez Muñoz
El primer cepillado…
Durante las primeras etapas de la infancia son los padres las personas responsables de mantener una adecuada higiene oral en sus hijos. Los cuidados y la higiene oral son esenciales, esta debe iniciarse desde recién nacido, para ello será necesario utilizar un cepillo oral para bebes o mejor aun una simple gasa humedecida con agua, con el fin de asear las encías y crear el hábito del aseo desde temprana edad.
Con la erupción de los primeros dientes, conocidos como dientes de leche o dientes temporales, se debe iniciar el cepillado de los mismos, sin ser necesario el uso de pasta dental. Esta primera dentición estan importante como la permanente que inicia su aparición en la cavidad oral alrededor de los cinco años, depende de cada niño el momento en el cual comienza a erupcionar los dientes.
Los niños deben aprender a cepillarse los dientes cuanto antes, iniciándolos en ello a manera de juego para crearles el hábito y no a manera de imposición porque podría generarles rechazo. A partir de los 2 años el niño tiene más capacidad motriz y querrá realizar el cepillado solo, aprender por imitación siempre será una buena lección, por ello es importante que los niños vean los padres se cepillanlos dientes y como usan el hilo dental, además de ser un buen ejemplo para aprender a usarlos, es un buen ejemplo de hábito de aseo, pero necesitará que un adulto les cepille nuevamente los dientes para asegurar el correcto aseo, será hasta los 6 a 7 años cuando el niño podrá hacerlo totalmente solo, pero siempre con la supervisión y ayuda de los padres hasta la edad de los 12 años.
El cepillado deberá realizarse luego de las principales comidas y sobre todo antes de dormir. El uso del hilo dental es indispensable, los padres deben enseñarle al niño a usarlo correctamente.
Recomendaciones generales…
Instaurar el hábito del cepillado es un proceso no siempre fácil. No solo por la necesidad de un buen desarrollo de la motricidad fina, sino por el estilo de vida agitada actual de muchas familias. Por lo tanto, es fundamental el respeto por este proceso por parte de los adultos, el cual se traduce en permitirle al niño, el tiempo requerido para un buen cepillado. El apurar al niño para que termine rápido con el procedimiento solo ayudará para que este perciba el cepillado como algo de poca importancia y que no necesita de mayor dedicación.
El cepillado debe ser sistematizado, es decir, se debe establecer un orden en las superficies dentales que se limpiarán primero y las que se cepillarán sucesivamente después. Uno de los errores mas comunes en el cepillado de los niños es “sobrehigenizar” ciertas áreas de la boca y no cepillar otras. Es importante respetar esta secuencia acordada para el cepillado, para que esta se establezca en la rutina de higiene oral del niño. Así, se puede iniciar principalmente por los lugares de mayor dificultad, como en las superficies linguales y palatinas de las piezas inferiores y posteriores, donde la mayoría de las personas no usa el cepillo eficientemente, o por el maxilar superior antes que la mandíbula.
Un correcto cepillado incluye el cepillado de la lengua y carrillos.
Es recomendable visitar al odontólogo pediatra periódicamente dos a tres veces en el año, porque así se creará la costumbre en el niño de las revisiones dentales, con lo cual disminuirá su ansiedad y temor a lo desconocido, y se podrá detectar cualquier problema en su etapa inicial, de esta forma la solución será sencilla y menos traumática.
Caries de…
La caries de biberón se conoce también con los nombres de caries del lactante y caries de la primera infancia, su nombre se origina gracias a que por el uso prolongado del biberón o antes de la siesta o a la hora de dormir y preparado con bebidas azucaradas, el paciente desarrolla caries dental en un gran número de superficies dentarias.
El desarrollo de la caries de biberón se inicia con una banda blanca de descalcificación en el tercio de la encía de los incisivos superiores, cambiando de color éste puede ir de marrón a negro y en casos avanzados las coronas de los dientes se fracturan por el margen de la encía. Este puede ser el primer signo en algunos casos que notan los padres de que existe un problema y acuden al odontopediatra con la queja de que los dientes del niño se le fracturaron repentinamente.
Los dientes de leche, juegan un papel muy importante en la salud oral y general de los seres humanos, es un error pensar que como los dientes temporarios se mudan, no ameritan mayor cuidado, son muchos los niños que diariamente son hospitalizados con infecciones dentales complicadas, cuyo inicio fue una caries de la dentición temporal, que al progresar ocasiona infección severa de encías y piel; y en algunos casos puede producir infección del maxilar y/o meningitis, poniendo en peligro la vida del paciente, otras complicaciones son: bajo peso, perdida de espacio para los dientes permanentes y alteraciones en el desarrollo de los maxilares, alteraciones de lenguaje y alteraciones emocionales por perdida prematura de los dientes.
Tratamiento…
El primer paso del tratamiento de esta patología es identificar, controlar y/o eliminar el factor o los factores etiológicos, realizando tratamiento odontológico completo en endodoncia, operatoria, cirugía oral, prevención y remisiones que correspondan.
Es muy importante que en este plan de tratamiento se involucre a los padres y las personas encargadas de preparar los alimentos del niño con el objetivo de informarles las desventajas del uso prolongado del biberón y sobre todo con bebidas azucaradas, además de instruirlos en la higiene oral del niño.
Recomendaciones…
Es muy importante no acostar al niño con un biberón que contenga algún líquido dulce.
Después de cada toma, limpiar las encías del bebé con una gasa con agua, o si tiene sus dientes erupcionados emplear un cepillo de dientes adecuado para la edad.
A partir del año poco a poco, debe eliminar la leche materna y el biberón.
Alimentación balanceada: frutas y verduras.
Visita al odontopediatra regularmente.