Dra. Gloria Ximena Camacho
Especialista en Ortodoncia – Ortopedia Maxilar
Fundación Clínica Infantil Club Noel
La maloclusión o mala mordida en los niños genera repercusiones funcionales en el habla, la masticación, desgastes en los dientes, sangrado en las encías, dolores de cabeza y molestias en la articulación de la mandíbula que pueden desencadenar otras complicaciones. Se puede identificar que una mordida no es normal cuando los dientes superiores no cierran adecuadamente con los inferiores. A pesar de ser múltiples las causas de esta complicación, existen algunas prácticas y factores que como padres podemos implementar para prevenir la mala mordida en nuestros niños:
- Amamantamiento: alimentar a los niños con lactancia materna ofrece muchos beneficios para su salud y desarrollo. Cuando los niños realizan la succión del pecho para alimentarse promueven el crecimiento de los huesos de la mandíbula y si estos huesos crecen alcanzando el tamaño adecuado, los niños tendrán espacio para todos los dientes definitivos.
- Alimentación dura seca y fibrosa: después de los 8 meses cuando el bebé ya haya empezado su alimentación complementaria debemos incentivar la masticación ofreciendo y enseñándole a comer alimentos duros como carne, pollo, (en pedazos que se puedan agarrar) frutas como mango, manzana, pera entre otras. A los 9 meses, dile adiós a las compotas y cuando tu niño cumpla un año despídete del tetero. En el momento en que ya se siente en la mesa a comer con el resto de la familia incluye alimentos duros y secos en cada comida. Si remojas todo en la sopa antes de que el niño se lo coma, estás volviéndolo perezosos para masticar.
- Ejemplos de algunos alimentos duros que se pueden incluir en cada comida:
- Desayuno: arepa tostada o pan francés.
- Media mañana: Manzana en casquitos
- Almuerzo: Carne. Permítale al niño desgarrar la carne con los dientes. No la corte en pedacitos pequeños.
- Media tarde: cereal seco tipo granola con un poco de leche o yogurt.
- Comida: tostadas de plátano.
Lo anterior son sugerencias de alimentos duros que pueden ser acompañantes de las diferentes comidas, no constituyen una dieta ni mucho menos son un patrón de alimentación para el niño.
- Enfermedades que pueden ocasionar problemas dentales y maxilares: Hábitos nocivos como chupar dedo, respiración oral, amigdalitis frecuentes, adenoides y otras enfermedades, alteran la forma de los maxilares y la posición de los dientes generando deformaciones faciales y graves problemas de mordida, sino se tratan a tiempo, es decir antes de los tres años. Identifique si su hijo presenta dos o más de los siguientes síntomas: ronquidos, boca abierta permanentemente, ojeras, labios resecos o congestión nasal constante y de ser así, acuda al pediatra.
- Salud Oral: cepillar al niño desde que tiene los primeros dientes en la boca es fundamental para el mantenimiento del espacio para los dientes nuevos. Inicie realizando limpieza con gasa húmeda en las encías desde que el niño no tiene dientes. Después del año use un cepillo de dientes suave sin crema dental. A los dos años inicie con el uso de la crema dental sin flúor así como la seda dental. Recuerde que cuando se pierden los dientes de leche, se pierde espacio para los dientes definitivos- Revisión con el especialista desde los tres años: acuda al odontopediatra u ortodoncista cuando el niño tenga 3 años. Así recibirá orientación sobre la salud oral de sus hijos y podrá detectar y tratar anormalidades a tiempo.
Recuerde que en la Fundación Clínica Infantil Club Noel contamos con el servicio de odontología el cual está conformado por un equipo interdisciplinario especializado en el manejo de niños y pacientes con condiciones especiales. Atendemos adultos y niños. Agende su cita de valoración comunicándose al 4854400 opción 1.